Estamos delante de una rara ermita de planta cuadrada que fue construida en el año 1895, sin bien fue ampliada a mediados del siglo XX. El cuerpo superior está finalizado con una balaustrada. Corona el conjunto una imagen pétrea de un Cristo barbado y rígido, labrado de manera frontalista, que abre su manto con las dos manos para mostrar su corazón rodeado por una corona de espinas. El interior de la capilla acoge un pequeño retablo con la misma imagen del Redentor, pero en un estilo más moderno. Unos 35 m al sudoeste de la ermita, una grande cruz labrada en granito que data del siglo XX. Presenta sección cuadrada. La cruz se sitúa sobre un afloramiento granítico natural desde lo que se ve la Ría de Vigo. En el punto desde lo que se divisa el valle del río Verdugo aparece una inscripción.